TRABAJO PRESENTADO

"Trabajo psicocorporal y calidad de vida"

Institución: Clínica Privada Banfield, Buenos Aires.

Temática: IV Actividad Física y Prevención en la Salud.

TRABAJO PSICOCORPORAL Y CALIDAD DE VIDA

El tema que nos ocupa es la calidad de vida y la tercera edad. En vista a esa etapa de la vida el "Plan de acción Internacional de Viena sobre Envejecimiento", reafirmó la convicción de que los derechos fundamentales e inalienables consagrados en la Declaración de los Derechos Humanos (ONU 1948), se aplica plena e íntegramente a las personas de edad. Por lo tanto, dice "Calidad de vida no es menos importante que la longevidad, por consiguiente las personas de edad deben, en la medida de lo posible, disfrutar en el seno de sus propias familias y comunidades, de una vida plena, saludable, segura, satisfactoria y ser estimuladas como parte integrante de la sociedad. Manfred Max-Neef, destacado economista chileno, líder de la economía a escala humana, se pregunta: Qué determina la calidad de vida de las personas?, a esto responde la calidad de vida de las personas dependerá de las posibilidades que tengan las personas de satisfacer adecuadamente las necesidades humanas fundamentales. Pero aquí le surge una segunda pregunta: Cuáles son las necesidades humanas fundamentales? Luego de algunas disquisiciones llega a la conclusión de que las necesidades humanas deben entenderse como un sistema, o sea todas se interrelacionan e interactúan y con la sola excepción de la de subsistir, o sea estar vivo, no existen jerarquías dentro de ese sistema. Por otra parte, dentro de él hay simultaneidad, complementariedad y compensación.

Propone también una división entre necesidades y satisfactores de esas necesidades. Así por ejemplo, alimento, vivienda, vestido, no deben considerarse necesidades, sino satisfactores de la necesidad básica de permanencia (subsistencia). Es muy interesante esta diferencia, ya que con dar a comprender que lo que está culturalmente determinado no son las necesidades fundamentales, sino los satisfactores de esas necesidades. Así, el cambio cultural sería, entre otras cosas, consecuencia de reemplazar satisfactores tradicionales por otros nuevos y diferentes.

Volviendo a las necesidades fundamentales, Max-Neef las categoriza de la siguiente manera: Necesidad de: 1) Permanecer (subsistir) (Vivienda, alimento, vestuario) 2) Protección (esquemas curativos, prevención, salud) 3) Afecto 4) Entendimiento (educación, investigación, estimulo) 5) Participación 6) Ocio 7) Creación 8) Identidad 9) Libertad.

Ese gran sanitarista argentino que fue el Dr. Ramón Gómez Carrillo decía: "No basta con dar años a la vida, sino que es necesario dar vida a los años.

Encuadrado en el pensamiento de estos dos grandes intelectuales presento mi trabajo. Lo hago así, porque por sus resultados, estoy absolutamente convencida que conduce a una mejor calidad de vida. Contribuye a satisfacer esas necesidades fundamentales de la que habla Max-Neef y la experiencia me muestra como ayuda a dar más vida a los años.

Expondré lo que vengo realizando desde hace varios años con personas mayores, en forma privada y en Centros de Día y desde 1993 en la Clínica Privada Banfield.

Me referiré a la forma de articular la tarea, sus fundamentos, sus técnicas, ejemplificando resultados con palabras de los propios beneficiarios.

Siempre que hablemos con trabajo corporal, habría que hacer una división, con límites por supuestos no totalmente precisos. El criterio de esta división lo da el grado de ruptura observado en ese inestable y delicado equilibrio psiofísico- espiritual que llamamos SALUD. Para el tema que nos ocupa, el envejecimiento normal sería salud y el envejecimiento patológico, enfermedad. Entre los viejos sanos, más mujeres que hombres, muchos concurren a los "gimnasios". Desde la perspectiva de los viejos enfermos, yo ubico mi trabajo dentro de lo que se ha dado en llamar "terapias alternativas". Como todos sabemos, estas son todas aquellas formas de mejorar, a veces restaurar la salud, desde ópticas distintas a las tradicionales y que no necesariamente son excluyentes. Ejemplos: Musicoterapia, Terapia del canto, Talleres de terapias narrativas, Talleres de memora, etc. Según el grado de salud del paciente, será el trabajo que se realizará.

Desde lo corporal y en referencia a las distintas técnicas o metodologías de trabajo, creo que todos pueden dar resultados efectivos. Desde ya, sin ejercicios violentos, por que hablamos de viejos.

Para llevar a cabo un trabajo corporal, cualquiera sea el grupo etario, pero muy especialmente cuando se trata de personas mayores, es básico la articulación de tres elementos a saber: - el coordinador o terapeuta - el alumno o paciente - el vínculo que entre ellos se entabla.

El coordinador: Es fundamental su preparación teórica práctica y muy especialmente el amor que sienta por lo que hace. El trabajo corporal no es teórico. Siempre es primero lo que se registra en el cuerpo. Cuanto más haya profundizado el coordinador o terapeuta corporal en sí mismo, más idóneo será en su trabajo. El trabajo previo y continuo sobre sí, no puede faltar. Aquí es condición necesaria, haber probado y profundizado sobre sí todo lo que se hace.

El paciente o alumno: Quién es esta persona que tenemos ante nosotros? La persona es un cuerpo, una psique, un espíritu y un ámbito en el que transcurre su existencia. Una evaluación física es importante. Esto ayudará al como, indicando que se puede y que no se puede mover. También lo son, la edad, los intereses. Su Biografía.

El vínculo: Es importantísimo el tipo de relación que se genere entre el coordinador/terapeuta y el alumno/paciente. El vínculo es el canal por el que transita la técnica. De la calidad del mismo dependerá gran parte de los cambios operados.

Yo hago gimnasia de centros de energía y creatividad. El modelo terapéutico que me guía, supone una búsqueda de la salud, a través de la integración cuerpo/mente/emoción/espíritu. Parto del cuerpo que se expresa y se encuentra con otros en esta búsqueda de manifestación de su ser más profundo y auténtico.

Y al hacerlo, crece y se desarrolla hasta niveles insospechados.

EN QUE ESTADO LLEGA LA PERSONA

Podríamos escribir mucho sobre esto. En general no hay noción de que se es un cuerpo. Se tiene un cuerpo, que para casi todos, hay que seguir aguantando, un cuerpo que habla a través del dolor, un cuerpo objeto = a objeto material. Y ese cuerpo, llega con todo el registro que los años, las experiencias buenas y malas, la vida toda ha inscripto, dibujado, marcado, en él. En mi experiencia, siempre más mujeres, que hombres, oscilan de un extremo a otro. No les pasa nada, o exacerban todo. La hipocondría es muy común en la mujer. Pero hombres o mujeres, no hacen más que profundizar en la vejez, el manejo que del cuerpo hicieron durante toda su existencia. Esto tiene mucho que ver con el medio sociocultural que han mamado, consciente o inconscientemente. "Como todos me decían que era muy alta, yo me achicaba", "Yo siempre tuve que esconder mis senos, son tan grandes, que me fui cerrando", "A mí me decían que las mujeres modocitas nunca miraban de frente", "Solo las locas se mueven tanto, una mujer decente debe ser quietita", "Solo las locas se ríen tanto". De que te reís?, frases comunes de escuchar, así se muestran hoy. Con dolores en todo el cuerpo.

No se pueden casi ni mover. O se mueven en bloque. Ni pensar en ir al suelo...

"A mí me duele la espalda". Y ni hablar de las cervicales, que son las malas de la película. Sus plásticas desdicen el objetivo de su creador... Espaldas encorvadas. Vientres voluminosos, la mayoría de las veces por malas posturas o por la mujer, que no renunció a ser niña. Sus apoyos son débiles. Los pies son todo un tema. Cayos y juanetes siempre presentes. Las caídas son frecuentes.

Otros, muy ansiosos. Los ceños están fruncidos. Las miradas no tienen brillo. A veces no para de hablar. Otros están callados. Ríen poco. No cantan. Algunos, no pueden llorar. Otros, lloran demasiado. La mente, es otra que no para nunca.

Tienen también grandes temores: a caerse, a no poder levantarse del suelo, a la enfermedad. La muerte tal vez no les asusta tanto, como si les aterra la vida que llevan. Han perdido a muchos de sus pares. Pero sobre todo han perdido sus roles, al haber declinado sus status. Los hijos ya no los precisan. Si los buscan, es para cuidar nietos, o pedirles dinero. Y los nietos, mientras son chicos se les acercan, por que cuando crecen ya los absorben sus obligaciones y los visitan muy poco. Son los "JUBILADOS" Los "para qué vas a hacer esto?" o aquello?" "A tu edad! "Cuídate, mirá que si te pasa algo yo no voy a poder cuidarte, con los chicos, la casa, el trabajo... . "Y cosas similares".

QUE HACER.

Mi experiencia indica que es mucho lo que se puede hacer.

Generalizando, podríamos decir que se trata de poner en marcha, de movilizar, flexibilizar, estructuras óseas, musculares, articulares, contenidos emocionales, a veces encauzarlos, que parecen detenidos en el tiempo. Esto trae como consecuencia el movimiento de estructuras psíquicas, contenidos emocionales y ciertas representaciones del cuerpo.

Cómo se hace esto? En principio, con mucho respeto, paciencia y fe. Partiendo siempre de lo que hay en los planos físico, emocional y mental. Trabajando desde las posibilidades y con las limitaciones de cada uno. Esta es una propuesta para desarrollar las propias posibilidades. No ubicándose en lo enfermo, sino en lo que queda sano. En las potencialidades dormidas, haciendo que se despierten, crezcan y se desarrollen. No hay estados ideales a alcanzar. Los avances se miden únicamente respecto de uno mismo y no de la comparación con los otros.

El clima de trabajo debe ser sin grandes responsabilidades. Sin que sientan obligaciones. Gozando plenamente la actividad.

Dentro de este encuadre, a veces sin música, pero fundamentalmente con ella, alterno los distintos movimientos. Caminar. Correr, si se puede. Saltar. Girar.

Elongar. Contraer. Flexionar.

Los apoyos son todo un tema en las personas mayores. A veces muy flojos, a veces muy tensos.

El espacio es muy importante. Espacio social y físico. El anciano pertenece al lugar que se le asigna. No olvidar que al revés del niño, él va achicando sus espacios de interacciones, de vínculos, de roles. De dominante pasa a dominado, de ejercer rol parental a rol filial. Dice las Sagrados Escrituras: "...Cuando eras joven tú mismo te vestías e ibas a donde querías. Pero cuando seas viejo, extenderás tus brazos y otro te atará y te llevará a donde no querías".

Los opuestos, la vida en sí igual es dialéctica. Permitirse él como sí. Alegría / tristeza. Amor / odio. Llanto / risa. Placer / displacer, etc.

Acá pueden aparecer emociones censuradas, son entonces vehiculizadas y vividas sin culpa.

El cuerpo y las emociones son instrumento de expresión. Los distintos ritmos ayudan mucho a esto. Descargar tensiones. Muy importante la relajación que lleva a la interioridad. Contacto consigo mismo.

El contacto con el otro es de gran riqueza porque rompe el circuito de privación sensomotriz. Lo mismo ocurre con los juegos corporales desde distintos estímulos externos: Música, palabras, poesías, diversos sonidos, dibujos, objetos, instrumentos. Conexión con la naturaleza y con el entorno gestando imágenes, movimientos.

Muy importante el uso del humor. Desde él, aplicado en el momento oportuno, se pueden hacer todo tipo de señalamientos.

Los movimientos van desde el modelo dado por el coordinador, hasta el generado por la misma persona. A veces son ellos, que turnándose y eligiendo la música, conducen la tarea. Ambos modelos son importantes. Al seguir al coordinador, van explorando sus propias posibilidades e imitando hasta donde pueda. Cuando funciona él como modelo, lo hace a partir de sus propias exploraciones. Ambos modelos son necesarios, porque necesario es su interjuego.

Este quehacer no privilegia la palabra. Pero ésta no está ausente. Se encarna en las consignas y además siempre cabe una reflexión.

QUE SE OBTIENE:

Se producen movimientos, valga la redundancia, y con ellos aparece la vida. Se hace presente. El cuerpo se registra no solo como lugar del dolor, sino también de placeres, que no son solo los sexuales. Se aumenta la autoestima. Se rompe el desequilibrio entre lo que se es y lo que se podría ser.

Entre la vida que se lleva y la que podría llevarse.

En los pacientes más trabajados se registran frases como las que siguen. "Siento vivo mi cuerpo", "Yo puedo, no, lo que podía hace 20 años, pero si puedo lo que creí que no iba a poder", "El movimiento me sale de adentro", "Me siento más liviana, siento que descargué", "No sé. . . tengo unas ganas de reírme. . .", "Sentí bronca por las injusticias y ganas de hacer cosas, de participar en algún grupo que trabaje para los demás".

En los que comenzaron hace menos tiempo, es frecuente escuchar "Me canso menos", "Muevo partes del cuerpo que antes no movía", "Mover ese hueso que UD, dice, de la espalda, me ayuda a que me duela menos el hombro", "Puedo flexionar mejor las piernas, o los brazos al levantarme", "Me pongo mejor las medias", "Giro un poquito más la columna", "Apoyo mejor los pies".

El mejoramiento se registra no solo en el plano físico, tan tangible e indudable. A partir de éste, hay mucho más. La modificación del afuera modifica el adentro y viceversa. Se conectan mejor con ellos mismos y por lo tanto con los demás. Se da un efecto multiplicador.

La vejez es una época de la vida en que podemos darnos tiempo para sentir, percibir otros aspectos de la vida. El envejecimiento incrementa la interioridad, que adquiere la forma de reminiscencia. "Acto o hábito de pensar en las propias experiencias pasadas y relatarlas". Esto no es privativo de la ancianidad, pero sí es característico de los viejos que nos ocupan. Y ella surge con una determinada música, con un aroma, con el tacto, con el uso de algún objeto, con un juego corporal, con cierto movimiento, con juegos infantiles...

Así se pueden recuperar placeres olvidados, pero no para instalarse en la nostalgia, sino para vivenciarlos en el presente Por último, deseo expresar también, todo lo que se recibe en este tipo de trabajo. No solo el paciente/alumno es el que crece. También el coordinador/Terapeuta, al poner el cuerpo, al jugar, al involucrarse en la expresión, en el sentimiento, aceptando el afecto, el agradecimiento que en estos pacientes es tan fuerte, observando los cambios en los demás, siente que su ser también crece y se desarrolla, de la misma forma que él lo propone para aquellos con quienes trabaja.

Con lo expuesto he pretendido describir cómo el trabajo psicocorporal al enfocar no solo aspectos corporales, sino también emocionales, con lleva la integración de ambos. Cualquier cambio perceptivo, cognitivo, emocional, físico o espiritual implica un cambio en toda la persona.

Es este crecimiento y descubrimiento personal uno de los más seguros indicadores de calidad de vida.

Buenos Aires, agosto de 1999 Lic. Gladys Elena ZILIOTTO

BIBLIOGRAFIA

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Max-Neef, M.: "La economía descalza".

ABSTRACT

Se parte del contacto de calidad de vida de Max-Neef y de las nuevas necesidades fundamentales que este autor considera. El trabajo psicocorporal tiende a satisfacer esas necesidades, por lo que se considera un medio para mejorar la calidad de vida.

Para realizar un trabajo psicocorporal, cualquiera sea el grupo etario, es fundamental la articulación de tres elementos: - Coordinador o terapeuta que conduce la tarea - Persona con la cual se trabaja - Vínculo que establece entre ambos La propuesta de trabajo, se aplica tanto a la vejez normal como a la patológica y se hace desde la gimnasia de centros de energía y desbloqueo de la creatividad. Se parte del cuerpo, porque al movimiento del cuerpo y la expresión conducen a la integración de cuerpo, mente y espíritu.

Se analiza como llega la persona. Se hace referencia a sus plásticas corporales, a la noción de cuerpo que tienen, el manejo que se hace del mismo.

Se pasa luego a describir lo que se hace, especificando el encuadre, los movimientos corporales, el uso de las emociones, espacios interno y externo, conexión consigo mismo, con los demás, con la naturaleza.

Se consigna luego lo que se obtiene. Con palabras de los propios viejos se registran sus sentimientos y cambios operados. El mejoramiento no es solo físico. Se modifica el adentro y el afuera. Hay un efecto multiplicador.

Aparecen lazos sociales, la solidaridad, la mejor conexión con ellos va con los demás.

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